Corren malos tiempos para la economía y víctimas de ello son los trabajadores, ya que las empresas han comenzado a hacer grandes recortes. En esta ocasión, la empresa malagueña Autobuses Portillo, ha anunciado que busca fórmulas para despedir a 100 trabajadores de su plantilla actual, que asciende a 600 personas. No obstante, la empresa no presentará un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) sino que buscará la fórmula para hacer un despido “de ajuste”.
El Comité de empresa se reunirá el próximo jueves, 8 de enero, a partir de las diez de la mañana en el Centro Cívico de Málaga, para concretar las actuaciones a seguir y proceder al despido del 17% de la plantilla.
Autobuses Portillo, perteneciente al Grupo Avanza, es concesionaria de la Consejería de Transportes de la Junta de Andalucía para prestar los servicios interurbanos de toda la Costa del Sol y Campo de Gibraltar, además de trabajar para diferentes ayuntamientos como Benalmádena o Torremolinos. Pasó a pertenecer a la empresa británica Doughty Hudson después de que su máximo responsable en Málaga estuviese implicado en el caso Malaya.
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