martes, 16 de septiembre de 2008

Drogas contra la crisis

El 3 de septiembre se realizará en Bogotá, Colombia, la segunda conferencia de la Comisión Latinoamericana sobre Drogas y Democracia, cuyo propósito de fondo es crear las condiciones para la legalización de las drogas ilícitas a nivel mundial. Esta comisión ha sido financiada por George Soros, el especulador y sicario económico al servicio del Imperio Británico.

Las actividades de esta comisión representan una amenaza de seguridad nacional, un peligro a la paz mundial y, en particular, un crimen contra los jóvenes de todas las naciones del mundo. Los gobiernos deben clausurar las actividades de este grupo de Soros, el mismo Soros que no sólo promueve el consumo de drogas, sino que también pretende provocar una guerra entre Rusia y Estados Unidos, guerra que de llevarse a cabo culminaría, como es obvio, en una guerra mundial termonuclear. Entre tanto, Soros opera como una mezcla de los corsarios sir Walter Raleigh y Francis Drake en el terreno de la especulación financiera internacional, al servicio de Su Graciosa Majestad británica.

Para comprender quién es en realidad George Soros, hay que recordar que a los 14 años de edad, este "Terminator" se convirtió en activista hitleriano y disfrutó de esa actividad, y ni siquiera le hizo la más mínima mella el hecho de provenir de una familia de origen judío. El padre de Soros lo dejó en tutela con un funcionario del Gobierno de ocupación nazi, encargado de expropiar los activos e incluso las dentaduras de oro de los judíos que iban a ser asesinados. Por casi dos años, Soros, según él mismo manifestó a los medios de comunicación (por ejemplo, a la televisora WNET en EU, el 15 de abril de 1993), disfrutó de esta experiencia que le forjó su carácter. Más de medio millón de judíos húngaros fueron asesinados por los nazis.

Los gobiernos deben proscribir las actividades de esta nefasta comisión, porque representan un crimen contra la humanidad.

Para imponer en Estados Unidos y, por ende, en el resto del mundo la legalización de las drogas, George Soros, el especulador y sicario financiero al servicio del Imperio Británico, ha decidido hacer de Colombia, México y Afganistán, en particular, ejemplos sangrientos que sirvan para demostrarle a las naciones del planeta la supuesta ineficacia de combatir las drogas ilícitas. Las victorias militares y políticas del Gobierno del presidente Álvaro Uribe en contra del narcoterrorismo de las FARC, y el optimismo desatado en el país y en la región por estas acciones, han puesto a Colombia en la mira de los promotores de la legalización de las drogas, quienes reconocen, con pánico, que toda su estrategia de chantaje se puede desmoronar al demostrarse que sí es posible derrotar al narcotráfico y al terrorismo..

Las conferencias de la Comisión Latinoamericana sobre Drogas y Democracia de Soros tienen como objetivo preparar el terreno para que, en la próxima evaluación de 10 años de la Asamblea General de la ONU sobre drogas, a realizarse en marzo de 2009, se adopte el "enfoque europeo" (legalización, descriminalización, suministro de drogas y jeringas a los adictos, etc.). No por casualidad, la siguiente reunión de esta comisión de Soros se realizará en la Ciudad de México en febrero de 2009. Paralelamente, el Transnational Institute de Amsterdam, también financiado por Soros, promueve activamente la legalización del opio en Afganistán. Dieciocho gurús promotores de la legalización de las drogas, encabezados por el club de ex presidentes traidores, César Gaviria de Colombia, Fernando Henrique Cardoso de Brasil y Ernesto Zedillo de México, dirigen esta comisión de Soros que une sus esfuerzos a los de la telaraña de fundaciones y ONG de éste y de otras redes británicas a nivel mundial, cuyo propósito es hacer accesible a todo el mundo las "drogas recreativas", legalizando su consumo y abaratando su costo. El sueño de la oligarquía angloholandesa es que haya un mundo de tarados, drogadictos y drogados fácilmente controlables por un minúsculo grupo de pretendidos amos de la humanidad, el Un mundo feliz de Aldous Huxley , el 1984 de George Orwell y El destino del Homo Sapiens de H.G. Wells.

La descriminalización de las drogas y su posterior legalización se presentan como la panacea para reducir los índices de violencia y criminalidad asociados con el carácter ilícito del narcotráfico. También se arguye que los pobres drogadictos, menospreciados y perseguidos, se ven expuestos a graves problemas de salud adicionales debido a las jeringas contaminadas, ¿Por qué no adecuar sitios para el consumo, proveerles sus dosis de drogas, las jeringas y todos los instrumentos necesarios para su placentera actividad? Con este lenguaje melifluo y sibilino, los legalizadores de las drogas pretenden reclutar a sus filas a las generaciones que han sido expuestas a la contracultura de las drogas, las perversiones sexuales y las sectas religiosas que se impulsó especialmente a partir de mediados de los 1960, con la denominada "Revolución de Acuario" o "Nueva Era".

Precisamente, como ha elaborado a detalle el estadista y economista estadounidense Lyndon H. LaRouche, esa generación de los sesentiocheros (baby boomers), que utilizaron todos los orificios de sus cuerpos para las más inverosímiles y torpes actividades, son ahora buena parte de los gerentes, ejecutivos y presidentes de las naciones, y, enarbolando el libertarianismo británico y las tesis de la Sociedad Abierta de Karl Popper (el dilecto maestro de George Soros), han conducido al mundo a la más grave crisis de desintegración económica y financiera jamás vista, y al peligro de una nueva guerra mundial, esta vez de carácter termonuclear. Soros ha financiado y convertido en celebridades, tanto al provocador de guerras y actual Presidente de Georgia, Mijaíl Saakashvili, como a Barack Obama en Estados Unidos.

Los golpes a las FARC, en especial, han abierto el potencial de que la deliberación regional sea la de la cooperación entre las naciones para hacer posible la construcción de grandes obras de infraestructura como el ferrocarril colombo-venezolano, propuesto por el presidente Hugo Chávez y aceptado por Uribe, al igual que la posible apertura de los llanos colombo-venezolanos para la producción de alimentos a gran escala. También se ha discutido con el presidente Luis Inácio Lula Da Silva darle impulso a corredores fluviales que sirvan de medio de transporte a través de los ríos Amazonas y Putumayo, con la perspectiva de buscar una salida al océano Pacífico para Brasil.

Pero Soros y la oligarquía financiera británica que lo controla tienen otra idea. Colombia, que ha aportado una brutal cuota de sangre por cuenta de las actividades de los carteles de la droga, se supone que deba servir de ejemplo para demostrar la aparente inutilidad de enfrentar al narcotráfico. Precisamente éste fue el mensaje que Ernesto Samper envío al mundo cuando organizó la conferencia "Marihuana, Mito y Realidad" hace un par de décadas, cuando se desempeñaba como presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF). Dijo Samper, ante un auditorio de 700 legalizadores del planeta reunidos en el hotel Hilton de Bogotá: Si Colombia no legaliza las drogas, empezando con la marihuana, entonces el país se verá arrasado por una oleada de terrorismo que destruirá a todas las instituciones, hasta que finalmente sea aceptada. Éste es el mismo proyecto británico de legalización de las drogas que el ahora fallecido ex presidente Alfonso López Michelsen y Enrique Santos Calderón (miembro de la actual comisión de Soros y director del diario El Tiempo) han promovido, so pretexto de pacificar a Colombia y al mundo.

Es tiempo que Colombia y el resto del mundo le digan "NO" a Soros, "NO" al narcotráfico, y "NO" al moribundo sistema financiero internacional que lo promueve y que hoy se desintegra violentamente.

Via espanol.larouchepac.com

3 comentarios:

Emor Villa dijo...

Estamos viviendo una etapa dura en el mundo. El tema de la globalización no solo se ve reflejado en las actas de los sensos mundiales. El tema es que ahora se hace algo en un sitio y indistintivamente otra parte del mundo se ve afectada.
Hemos pasado de la exclavitud y la libre elección a la manipulación. Ojalá tengas tiempo para ver esto. Es un buen documental para que nos demos una idea de las cosas que se nos pueden ocultar.
http://video.google.es/videoplay?docid=8883910961351786332
Ese es el link para que lo veas si tienes tiempo, si no tienes, date y verás que es bueno.
No sé como va a parar esta situación pero es verdaderamente alentador saber que existen personas en el mundo que no pueden ser engañadas y por lo menos se preocupan por hacer algo.

J.T. Capablancka dijo...

¿Y por qué hay que continuar con la prohibición de las drogas?

Creo que no se ha dado ni una sola razón... El autor sólo funciona a través de clichés e ideas preconcebidas (prejuicios).

:_(((

www.capablancafueelmejor.com

abadom dijo...

usted disculpe, pero la politica de la pohibicion, hace AÑOS que a demostrado su ineficacia.
Existen numerosos y amplios datos, que indican que la legalizacion de dichas sustancias, disminuye su consumo de manera radical. Le sugeriría revisar la crisis de la ginebra (Inglaterra) o las guerras del opio (china) o si lo considera mas cercano en el tiempo, del acta volstead (ley seca). Citando a buñuel "jamas bebí tanto alcohol, como en los eeuu durante la ley seca.

La proibicion, solo corrompe a los agentes de la ley, y destruye la confianza de los ciudadanos en el sistema legal. Mas de un 50% de la poblacion en españa, a fumado un "porro" en su vida.....!!metamoslos todos en la carcel y tiremos la llave¡¡ ams no, no tenemos tantas carceles.